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No hace falta. Paula, pronto tendrás años. Me voy a casar, padre. ¿Con quién? Con el mejor pintor de Worpswede. ¿Qué? ¿Mackensen? Otto Modersohn. Que sí. Di que sí, padre. Sí. ¡Nos vamos a casar! ¡Me estoy casando! ¡Esposa de Rilke! ¡Esposa de Modersohn! ¡Pintaremos todo el día! ¡Todo el día! ¡Viajaremos tú, yo, Otto y Rilke! ¡Tú y yo! ¡Una vez al año a París! Mi padre quiere que asista a una escuela de cocina antes de la boda. ¿Por qué? Tienes suficiente tiempo. Quiero llegar a los años. Entonces debes apurarte. Mi vida será una fiesta. Una breve e intensa celebración. ¿Cómo? No voy a vivir mucho. Pero si pinto tres buenos cuadros, entonces me moriré contenta. Tres buenos cuadros y un niño. ¿Es por causa de Helene? No. No. No. ¿Me darás tiempo? Toda mi vida. AÑOS DESPUÉS ¡Paula! Papá dijo que debías venir. Ahora no, estoy trabajando. Le diré que irás cuando termines. Paula, tienes que venir. ¡Paula! ¡Enseguida! Ya puedes atenderlo, Hilke. ¿Cuánto vale? Había pensado… ¿Por favor? marcos. El corazón, qué honor. Elsbeth, toma el pañuelo. Buen apetito. Buen apetito. Exquisita, querida señora Modersohn. Debe ser maravilloso estar casado con una cocinera así. Paula también pinta. ¿Sí? ¿Hay algo que se pueda ver? Ese. Casi me engañas. Ese es tuyo. La pequeña artista, genial. Salud. Sí, por el arte. marcos. Paula. ¡ marcos! ¡ marcos! Ni siquiera Mackensen consigue tanto. Bien. “¿Bien?” Sí, bien. Tú también vives de mis cuadros. Gracias. ¿Paula, qué quieres que haga? Estás distante de todo. Mi consejo ya no te interesa. Odias cualquier cosa que sea convencional, bien. ¿Pero es mejor lo cuadrado, extraño y bizarro? Bocas como heridas, narices como pistones, manos como cucharas, expresiones como cretinos. ¡No te llevará a ninguna parte! A nadie le gusta tus pinturas. Gracias, por finalmente decirlo. Paula. Paula, detente. Paula, Paula, detente. Para. ¡Para! Cinco años ¡He estado esperando años para que me hagas tu esposa! Pero, yo… ¿Sí? Tendremos un hijo, cuando estés lista para eso. ¡Basta! Paula. Oye. Detente, ya. ¡Déjame! Hilke. ¡Hilke! Hilke. Feliz cumpleaños, Paula. Gracias. Tienes que soplar. Hazlo tú. Ahora debes darle un regalo. Feliz cumpleaños, Paula. Gracias. Era de mi madre. Es hermoso. Esto llegó ayer. El pastel lo hicimos papá y yo. ¿Sí, de chocolate? Yo sola escribí el . Sí. Vístete para la escuela. Vamos. ¿Estás abrigada? Sí. ¿Elsbeth? Debes querer mucho a tu padre. Siempre lo hago. Lo sé. Ya tengo que irme. Sí. Me voy. Bien, no llegues tarde. Algunos serán puntuales. No. Si regresas a las tres, está bien. No voy al estudio. ¿Entonces? Voy a París con Clara. ¡Paula, por favor! Escucha. ¡Regrésalos! Es tu cumpleaños. ¡Regrésalos, Otto! Sí, sí, Paula… Paula. Hoy es tu cumpleaños. ¡Qué feliz nos hace! ¡Cómo nos complace! Sí, sí, Paula… Paula. Es una maravilla. Y te damos una… ¡Tarta! ¿Cuánto tiempo quieres quedarte? ¿De qué vas a vivir? Tengo dinero. Te escribiré si hay alguna novedad. Paula. Cinco años. Paula fue al estudio por poco tiempo. Bueno, es como te dije. Creen que si el deseo está ahí entonces está bien. Come, ¿sí? ¿Está enfadada conmigo? No. Entonces es por ti. ¡No! ¿Cuándo regresa? No lo sé. ¡Le Petit Parisien! Cuidado, señora. Señor. ¿Dónde queda esto? Lo siento. ¿Te puedo ayudar? Sí. ¿Queda aquí? Está en el sur, puedes tomar el tren. Lo mejor es tomar el tranvía, luego te tomará minutos. ¿Has entendido? No. Eso pensé. ¿Bruno? ¡Oye, son dos francos! Espérate. Bien… Estamos aquí, toma el tren aquí. ¿Entiendes? Por esa dirección, puedes quedarte con él. Buenas noches. Hasta mañana. Te ves cansada. Sólo tengo mucha sed. Los tiranos están contra nosotros, la sangrienta bandera se levanta. Se acabó la relación con Rilke. ¿Qué quieres decir con “acabó”? Se acabó. ¿Y tu pequeña hija? Rilke apenas recuerda su nombre. Pero aprendes de Rodin. Sí, mírame. Así es como se ve una esclava del más grande artista. Trabajo, trabajo con todo el cuerpo. Buenas noches, damas. Buenas noches, señor. Esperaban por nosotros. Son encantadoras. Estamos casados, queridos amigas. Casados…. Dime. ¿Sí? ¿Rilke te da dinero?