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Te he amado como un hombre debería amar a una mujer. Con cada fibra de mi vida estoy apegado a ti. Intentémoslo otra vez. No me castigues toda la vida así. No me hagas sufrir el dolor de la pérdida permanente. Mi alma te ama, en toda la extensión de la palabra. Siempre tuyo, Otto.” ¿Camille, estás bien? ¿Cómo está el genio? Desde que te fuiste. ¿Sabes dónde está ahora? En el Salón de Meudon. Es cien veces más grande. El genio que me lo robó. No sé. Por francos, es tuyo. No los tengo. Un franco, por un franco es tuyo. El señor lo tomó por francos. Es un regalo. ¡Camille! Clara nunca llegará muy lejos. Porque no tiene ningún apoyo. ¿Como tú? ¿Qué sabes de Worpswede? Otto se siente abandonado. Debería estarte agradecido. La soledad es la fuente del arte. Paula… Olvídate de Worpswede. Esto es arte alemán. Lo leí de otro modo en tu libro. Yo… Tengo que ganarme la vida escribiendo. Pero estamos en París. Aquí hay nobleza artística. Necesitas vender tus cuadros. Aún no estoy lista. ¿Tienes diez francos? No. ¿Has robado antes? Es el taller principal. Paula. Paula. Para los compradores. Paula. ¡Fantástico! Paula. ¿Tienes hambre? Toma, tómalo. Buen apetito. ¡Eres maravillosa! Muy bien, señoras. Gracias. Gracias, ¿qué es esto? Dos absentas, por favor. Para ti. Gracias. Bernard, vamos, ven. ¿Sarah, vas a venir? ¡Muy bien! Aquí, gracias. Por favor. Perdón. Sí. Paula, pintas como ninguna mujer ha pintado antes. Esto es increíble. No te entiendo. Paula… Estoy aquí para hacerte feliz. ¿Vienes conmigo? Sí. ¿Sí? ¿De quién es este? Cézanne. Gracias. De nada. No, gracias de verdad. De nada. Gracias, gracias, gracias. Por nada, por nada. Le dije que se tomara todas las libertades. Si una aventura amorosa llama, que se sintiera libre. ¿Qué? Si Worpsvede ya no le agrada, nos mudamos donde quiera. Pero no contesta, Heinrich. Todo lo que quiere es dinero. Fritz tiene razón. La condición morbosa de Paula se nota: El egoísmo, la enfermedad moderna. Ya lo dijo Nietzsche, el padre. “Piensa en ti mismo, cuídate.” Como los Rilkes. Eso no es verdad. Las mujeres modernas no pueden amar Heinrich. O su amor es sólo animalesco. La psique no participa. Paula es sensible. Eso debe ser lo peor para una mujer. Ser inteligente, pero ser mujer. Eso ya lo sé. No lo es, pero… ¿Quizás si hubiera podido tener un hijo? ¿Pero cómo, Heinrich? ¿Cómo? Nuestra noche de bodas fue… Me puse nervioso en el matrimonio. Pero ya has tenido… ¿Otto? ¿Nunca antes? No quería que fuera madre. Rembrandt perdió a Saskia en el postparto. Tenía miedo por su vida. Dios. Y Paula, ¿qué dice Paula? Aún no se lo he dicho. Nunca se lo dije. ¿Están buenas? Están deliciosas. Son muy sabrosas. ¿No te habías casado antes? Me guardé para ti. ¿Qué quiere decir eso? Hasta el º aniversario de bodas. Sí, sí. Sí, empiezas a aprender bien francés. No. No, no, no. Ponte de pie otra vez. Eso no es un juguete. No es un juguete. Un paso atrás. Un poco más. Atrás. Mírame. Espera. No sonrías ni te muevas. ¿Lista? ¿Quién es? Soy yo. Un momento. ¿Qué tan tarde es? Las diez. ¿Puedo pasar? Has estado ocupada. En mi lápida dirá: “Se esforzó”. Vogeler escribió. ¿Y? La Junta se reunió. Alega que estás en problemas por tu “condición morbosa”. Paula, hay instituciones para mujeres que están casadas. La histeria de la mujer… Pero Otto nunca… No estoy seguro de que aún esté de tu lado. Eso es una tontería. ¿Crees que realmente te reconoce? ¿Sabes quién eres? Este eres. ¡Paula! Buenos días. ¿Interrumpo algo? No, no interrumpes nada. Quien se rodea de mediocridad, siempre sigue siendo mediocre. Adiós. Gracias. ¡Papá! ¡Recibimos dos cartas de Paula! Una pequeña para ti y una gruesa para mí. ¿Puedo abrir la mía? Por supuesto. Mira, esto es gracioso. “Elsbeth va diligentemente a la escuela…” “París, de septiembre de . Otto, no me gusta que seas un caballero. No me gusta eso. Ríndete, no te tortures más, libérame”. ¿Sí? Sí, ¿quién es? ¿Qué? Ven. Esto lo escogió Elsbeth para ti. No te anunciaste. Lo he hecho. Ojalá nos lo hubiéramos ahorrado. ¿No recibiste mi carta? Por eso estoy aquí. Esperaba que habláramos.